América Latina intensifica esfuerzos contra nueva emergencia sanitaria
La OMS declara emergencia global por viruela símica Clado I; países de Latinoamérica refuerzan medidas para prevenir propagación del virus.
América Latina enfrenta un nuevo desafío en materia de salud pública tras la reciente declaración de emergencia sanitaria global por la viruela símica, conocida como Mpox. La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió la alerta el 14 de agosto de 2024 debido a un brote en el continente africano de la variante Clado I, una cepa que ha generado preocupación por su gravedad y alta mortalidad. Aunque los casos reportados en la región corresponden mayormente a la variante Clado II, los países latinoamericanos no han bajado la guardia y han intensificado sus medidas preventivas.
En Venezuela, las autoridades han reforzado la vigilancia epidemiológica en puertos y aeropuertos, especialmente para viajeros provenientes de regiones afectadas. El gobierno asegura contar con la capacidad de diagnóstico molecular a nivel nacional y ha comenzado a gestionar la adquisición de vacunas. Los viajeros que ingresen al país deberán completar fichas de vigilancia epidemiológica para facilitar el seguimiento de posibles casos sospechosos.
Argentina, uno de los pocos países de la región que ha reportado casos durante 2024, también ha incrementado sus esfuerzos de prevención. Con al menos ocho contagios confirmados en diferentes provincias, el Ministerio de Salud ha fortalecido las medidas de aislamiento y rastreo de contactos, además de actualizar las recomendaciones en puntos de entrada terrestre, aéreo y marítimo.
Brasil, con una cifra acumulada de 709 casos confirmados o probables en 2024, ha instalado un Centro de Operaciones de Emergencia Sanitaria (COE) para coordinar la respuesta a la Mpox. Aunque el país registró una disminución significativa en los casos desde el pico de 2022, las autoridades han revisado sus planes de contingencia y continúan con un proceso de inmunización provisional.
Colombia, donde se han reportado 109 casos de la variante Clado II en 2024, ha decidido intensificar la vigilancia en salud pública y reforzar la comunicación de riesgo en coordinación con la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Las autoridades colombianas aseguran que hasta ahora no se ha detectado la variante Clado I en su territorio, pero ya están tomando medidas para asegurar el acceso a vacunas en caso de necesidad.
México, a través de su Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (Conave), ha emitido un aviso epidemiológico para todas las unidades médicas del país, instándolas a notificar cualquier caso probable de Mpox. Con 49 casos confirmados en 2024, todos de la variante Clado II, el país se mantiene alerta ante el riesgo de propagación de la nueva cepa.
Otros países de la región, como Chile, Perú, Bolivia y Paraguay, también han implementado estrategias preventivas y campañas informativas para mantener a la población alerta. En Centroamérica y el Caribe, las autoridades han reforzado la vigilancia epidemiológica y la comunicación para prevenir la diseminación del virus.
La viruela símica, que se manifiesta con fiebre, mialgias y exantemas vesiculares, tiene un periodo de incubación de hasta dos semanas y puede prolongarse durante un mes. La nueva variante Clado I ha generado especial preocupación por su mayor letalidad en comparación con la cepa detectada en 2022.
En el continente africano, donde se originó el brote actual, la situación es alarmante con más de 2.800 casos confirmados y 517 muertes en al menos 13 países. Europa, especialmente España, también se ha sumado a las preocupaciones globales, siendo el país con más casos detectados en el continente.
Ante este panorama, América Latina permanece en estado de alerta, trabajando en conjunto con organizaciones internacionales para evitar que la emergencia sanitaria se extienda y afecte a más personas en la región.