¿Por qué se festeja el Día de las Madres en México?
En cada rincón de México, el 10 de mayo se convierte en un día de celebración desbordante, donde se exalta el amor y la gratitud hacia las madres. Sin embargo, pocos conocen los verdaderos orígenes de esta festividad arraigada en la historia y cultura del país.
La conmemoración del Día de las Madres en México tiene sus raíces en el siglo XX, marcada por el impulso de José Vasconcelos, reconocido secretario de Educación Pública entre 1921 y 1924. Fue él quien, con visión de reconocimiento hacia las mujeres y su incansable labor maternal, propició la institucionalización de este día de homenaje.
La elección de la fecha, el 10 de mayo, no es casualidad. Además de ser un mes dedicado a la Virgen María, figura maternal por excelencia en la religión católica, el número 10 representaba una estructura numérica familiar en la época, donde los salarios se solían pagar en décadas. Aunque algunas fuentes también sugieren un origen incluso más antiguo, datando de 1913 en Oaxaca, cuando la esposa de un presbítero metodista tomó inspiración de una revista extranjera para iniciar la celebración.
El legado de esta fecha trascendió las fronteras de México, convirtiéndose en una conmemoración adoptada por toda Latinoamérica. Tanto es así que en 1949, en la Ciudad de México, se erigió una monumental escultura en honor a la maternidad, destacando la importancia que esta festividad ha adquirido en el tejido cultural del país.
Más allá de las festividades y los regalos, el Día de las Madres es un momento para reflexionar sobre el papel esencial que las mujeres desempeñan en la sociedad mexicana. Son pilares fundamentales en la vida familiar, dedicadas al cuidado y al amor incondicional hacia sus hijos e hijas.
La celebración se despliega en una amplia gama de expresiones: desde las reuniones familiares donde se comparten comidas especiales y muestras de afecto, hasta las actividades escolares donde los niños rinden homenaje a sus madres con creatividad y cariño.
En última instancia, el Día de las Madres no solo es una tradición arraigada en la cultura mexicana, sino también una oportunidad para reconocer y promover la igualdad de género, así como el respeto y la admiración hacia las mujeres que, con su amor y dedicación, sustentan el tejido social del país.